La realidad insular de Cuba hace que probablemente
todo el mundo tenga su costica. Esa orilla del mar donde alguna vez soñó, amó,
lloró, sufrió, pensó, creció. No hablo de una de nuestras hermosas playas de
arena fina. Me refiero a esas de diente de perro que están en muchas costas del
país, y que ayudan a pensar la vida. Sin la nobleza engañosa de la arena, en
ellas están sólo las rocas filosas bajo tus pies y esa transparencia
inquisidora del mar caribeño.
La costica que a mí me “corresponde” está en la calle
110 de Municipio Playa, al oeste de la capital. Hacia allí nos escapábamos
desde mi secundaria cuando queríamos evadir una clase muy aburrida. En ella vi,
consternado, hace 24 años, como familias enteras partían mar adentro en
endebles embarcaciones, cuando la crisis de los balseros.
Siempre que voy a Cuba, como un hijo agradecido y
obediente, voy a saludarla. Me impresionó encontrarla repleta de brujería.
Ofrendas, frutas, animales muertos. En el rato que estuve ahí fuimos testigos
de varios ritos de santería. Por ejemplo un hombre que tiró en la orilla un
carnero y luego una gallina grande. Ambos animales muertos, claro. O una
familia que se despojaba con un gajo, primero ella, luego la niña, por último
el papá.
Está bueno que haya ashé pa’ los tuyos y pa’ los míos. No está tan bueno, que se
consiga ensuciando las costas y playas. No quiero irrespetar ningún rito ni
creencia, pero tal vez los orishas puedan entender ciertos cambios. Y si los
Orishas entienden, tal vez otros seres más terrenales, también se entusiasmen
con ideas novedosas y de cambio. Falta nos hace, tanto ashé, como ideas nuevas.
Tema: Dios Mío
El ultimo verano nos bañamos esquivando esas ofrendas. Ha ido a más en nuestra costica no se bien por que razón..
ResponderBorrarLa verdad es que no entiendo mucho de ofrendas religiosas en el siglo XXI pero si esas ofrendas incluyen tirar animales muertos en el litoral de cualquier lugar cubano o no, pues me parece que habría que lograr que no se hicieran en lo absoluto. Por suerte nunca he viso tal cosa en la "playita de 110".
ResponderBorrarNo sabía de esos ritos en mar, pensaba que siempre eran "en secano".
ResponderBorrarY por cierto, muy ecléctico Pedrito... llama la atención su imagen-su música-"decorado" A-"decorado" B. Curioso, pero se deja oír.
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